¿Machismo ¿En la escalada? Nahhhh......
Cuando hablamos de la comunidad escaladora creo que en general pensamos en un conjunto de personas de mente abierta, relajadas, y amigables de muchas formas; pero lamentablemente eso no nos exenta de vivir algunas situaciones desagradables como el elitismo, faltas de respeto generalizadas y si, machismo, discriminación y sexismo.
ANTES DE QUE SIGAS LEYENDO.... quiero aclarar, antes que nada, qué dentro de la comunidad outdoor, y en todas las comunidades, hay grandes hombres que son aliados de la lucha feminista. Son empáticos y respetan a las mujeres; no, no todo los hombres son iguales, pero cuando vemos los números y la mayoría es la que realiza un cierto tipo de acción podemos generalizar, así que en el resto del texto hablare de hombres omitiendo a quienes no realizan estas acciones, pero invitando a todos a observar sus acciones y analizando como puedes mejorar tus actitudes hacia las mujeres y cualquier otra personx.
Nuestro deporte todavía está “dominado” por hombres, aunque la cantidad de mujeres crece cada día es muy probable que si vas a un gym o a una zona de escalada, veas más hombres que mujeres, además de que el grado promedio es más alto en ellos y si bien los números van en aumento, cada vez hay más mujeres y cada vez el grado es mayor. Predominan en los espacios los hombres; esto es importante si entendemos el por qué social y cultural de origen. En nuestro país y en muchos otros se enseña que el hombre es el fuerte y deportivo por lo que hay una mayor tendencia a que los deportes como el nuestro sean practicados más por ellos que por ellas, ya que nosotras “no contamos con la fuerza o la capacidad”, esto acompañado de otros pensamientos machistas que crean actitudes indeseables en muchos.
Sabemos que la situación es grave en general, en nuestro país, según datos del SESNSP mueren aproximadamente 10.5 mujeres al día, pero el feminicidio es el último paso, antes hay varios comportamientos presentes en los hombres, como los micromachismos y el acoso, que lamentablemente ocasionan que los espacios de escalada no sean 100% cómodos para las mujeres escaladoras. Según encuestas realizadas por Beta Violeta, el 75% de las mujeres considera que el machismo es un problema en la escalada deportiva y el 94% de ellas lo han vivido o presenciado.
Quiero decir que yo he tenido la suerte de que mi paso por la escalada ha sido muy amigable y pocas veces me he encontrado con estas actitudes o en situaciones incómodas, pero siendo más clara, comencé a escalar por que mi novio se sintió interesado por el deporte y empecé a ir con el, entonces siempre he estado acompañada por un hombre tanto en gimnasios como en zonas de escalada, lo que automaticamente me hace menos propensa a sufrir de estas situaciones como muchas que van acompañadas (claro, si no las provoca el hombre con el que estas). Mi círculo de amigos además está compuesto por varios hombres con ideologías parecidas a las mías y creo que nunca o rara vez me he encontrado escalando en un grupo de puras mujeres, pero ese no es el caso para la mayoría de las chicas, quienes van solas o en grupos de mujeres en los que han sufrido comentarios molestos, muchachos que no respetan sus espacios, no aceptan un NO por respuesta y hasta acciones más graves, como casos de acoso.
Lo que me gustaría que tengamos claro es que ....
Si eres o te identificas como mujer: Que no lo veas o no lo vivas no significa que no exista.
Si eres o te identificas como hombre: Que no lo hagas no significa que no suceda.
Si eres o te identificas como hombre: Que no acoses, violes o mates no significa que no estés haciendo alguna otra acción machista.
Me parece que los micromachismos son los más constantes en la escalada, desde comentarios en los que se afirma que hay “beta de mujeres”, o que un hombre automáticamente piense que puede hacer algo solo por que una mujer lo hizo, sin importar el grado que escale cada quien. También te encuentras con el que te comenta que mejor ni lo intentes por que no te va a salir y muchos otros.
Este tipo de experiencia de vivir la escalada sin o con pocos micromachismos, tristemente, no es la norma, es la excepción y para que no se queden solo con mi historia o mi punto de vista algunas hermanas escaladoras me ayudaron a escribir en breve lo que han vivido, espero que leer las experiencias y reflexiones de otras nos ayude a crear una conciencia real de lo que vivimos y que tanto hombres, mujeres y otres podamos convertirnos en aliados del movimiento y empecemos a crear ambientes de igualdad libres de machismo desde nuestro deporte y que puedan ser extrapolados a la vida diaria.
“Me ha pasado que me subestiman en cuanto a fuerza los hombres que no me conocen. En el gimnasio algunos llegaban a querer apantallar y se ponían a hacer barras, luego me subía yo a hacer barras y se sacaban mucho de onda... Me daba risa por la satisfacción de demostrarles que una mujer también puede y me daba coraje darme cuenta que es una creencia general el considerar que las mujeres somos débiles y yo lo creí en su momento. Si bien no tenemos la misma fuerza física, por que nuestros cuerpos tiene algunas diferencias, eso no significa que seamos débiles Es mas parte de la narrativa... hoy creo que pensar que una mujer no puede hacer una barra (por ejemplo) es una idea mal informada y machista...” Fabiola Chavez.
“Me gusta pensar que desde morrilla he luchado por la equidad. Nunca me gustó quedarme callada tuve varias discusiones con aquellos que no me dejaron jugar en el recreo al fútbol porque soy niña.
Nunca me gustó quedarme con él " no puedes hacer eso porque eres niña" y lo que más me hacía feliz era darme cuenta de que podía hacer lo que quisiera hacer. Eso me hizo crecer y darme cuenta de que todo va de las habilidades que tengas, desarrolles y de cuanto trabajes por ello sin importar el hecho de ser hombre o mujer......Siempre me han gustado los deportes, recuerdo que cuando empecé a ir a gimnasia tenía un miedo enorme por que mi espalda se ensanchara y mi cuerpo se volviera grande y "masculino". Me miraba al espejo seguido en busca de seguir flaca.
En la universidad conocí la escalada, me volví loca, me enamoré completamente de cómo es la vida cuando escalas. Me pasaba mucho que la banda me veía llegar a la zonas de escalada con mis amigos que en su mayoría son hombres y solían recomendarles rutas difíciles o les decían cosas como "si se ve que tú estás bien fuerte" y yo recibía los, "Ahí están las fáciles", "¿Le vas a poner las cintas tú?", "Esa ruta está dura ehhh", "Deberías darle a x ruta, te va a gustar es muy de niñas" llevó 3 años y medio escalando y esas son pocas de las muchas cosas que me han dicho en seguidas ocasiones en las zonas de escalada por el siemple hecho de ser mujer. Siendo honesta en mi mente todos estos comentarios, según yo, eran por como luce mi cuerpo y es que yo solía sentirme un poco "gorda" o no tan fit como las escaladoras....
Seguido venían a mi algunos pensamientos cómo "ya te creció el brazo" "la espalda se ve más grande que antes" "no te ves marcada" "tienes panza" y poco a poco y con ayuda de mis amigos me di cuenta de lo feliz que me hacía escalar y de lo poco que me importaba si me veía "masculina" con el tiempo empecé a vivir cerca de las zonas de escalada y descubrí que es el deporte que quiero siempre en mi vida, ahora veo con felicidad mis brazos y me emociona saber que están creciendo y que cada vez soy más fuerte para escalar y conocer rutas bellas por todos lados, ahora me veo al espejo y aunque se que de vez en cuando todavía caigo en juzgarme y me encuentro defectos y siento que no tengo el cuerpo perfecto, cada vez me quiero más y más fuerte....”. Aryam Araux
Vivir en un mundo “de hombres” de por si es complicado y más en el deporte pero creo que estas dos historias son un lindo ejemplo de que aunque la sociedad nos quiera encerrar en algo nosotras podemos cambiar esa perspectiva como mujeres y amarnos a nosotras mismas y entre nosotras; como hombres les toca ayudarnos a promover esas ideas y erradicar esos pensamientos retrogradas para poder movernos hacia una sociedad más equitativa.
Por Fer Torres y una grandes escaladoras